El diputado por El Hierro, Juan Manuel García Casañas, exhortó a la Consejería de Agricultura del Gobierno de Canarias a emprender acciones inmediatas, dinámicas y efectivas que eviten el colapso de “la piña tropical herreña, que podría estar viviendo el principio de su final, si nadie lo remedia, sumida en una crisis de producción fruto de la falta de apoyos para solucionar problemas crónicos, como son la calidad de la planta y de la tierra”.

En los últimos años, pese al incremento de la superficie cultivada, la producción ha ido paulatinamente reduciéndose, “por estas fechas deberíamos estar hablando de una cosecha que rondaría los 25.000 kilos, sin embargo no se han alcanzado los 16.000 kilos, e incluso algunos productores han empezado a sustituir este cultivo, que llegó hace treinta años a El Golfo como alternativa al plátano y sus problemas con los fuertes vientos que afectan cíclicamente a la zona” apunta García Casañas.

Para el también presidente del Partido Popular (PP) en El Hierro, “es incomprensible como el Gobierno de Canarias prohibe la utilización de productos fitosanitarios autorizados en otros países de la Unión Europea y que supondrían de gran ayuda para sanear los suelos y las plantas, incluso no permitiendo ya la fórmula de ventanas temporales de cuatro meses de permiso para emplearlo. En Canarias la piña herreña tiene que luchar contra la introducción de piña ilegal por la falta de controles en nuestros puertos y una bajada en nuestras producciones insulares puede incentivar a que nuestros clientes, hoteles y restaurantes, busquen este producto acudiendo a productos de cuarta gama o piña procedente de terceros países cuya entrada a Canarias es ilegal”.

“Desde el Partido Popular pedimos al Gobierno de Canarias celeridad y acciones para remediar esta situación que supondría un duro golpe para la economía herreña, que no es desconocida por los máximos responsables del Ejecutivo canario, que cuenta con los medios técnicos y económicos suficientes para superar este bache, garantizando a nuestros consumidores un producto propio y de calidad” concluye García Casañas.