Quien se pueda sentir mal por esta noticia.(Jesús Pérez Quintero lidera una demanda colectiva para el reclamo patrimonial y moral por los falsos positivos de COVID-19) Aquí no se trata de poner en mal lugar el gran esfuerzo que están desarrollando nuestros sanitarios aquí y en todo el mundo, faltaría más, valoro muchísimo el arriesgar su propia vida por salvar la de los demás y se de lo que hablo, aquí lo que uno está poniendo en evidencia es que el protocolo en cuanto al COVID -19 en nuestra isla (HOSPITAL ) y probablemente en muchos lugares de España y el mundo no están funcionando, el hacer esta reclamación y denuncia, es para mejorar los protocolos a seguir en esta cuestión que a mi juicio, no funcionó.

Las instalaciones puestas en nuestro hospital para desarrollar la pruebas COVID-19, no son las adecuadas, ni las correctas ante las normas impuestas por sanidad para evitar contagiarse de COVID-19, unas instalaciones que aparte de estar a la vista de todo el público y de la sociedad en la que vivimos en esta isla, que nos conocemos todos, no cumplen con las normas, unas instalaciones que carecen de ventilación, que al mismo tiempo que se agarran los datos a los posibles afectados por COVID-19, coinciden con los que pasan para hacerse la prueba y coinciden no solo al entrar sino también al salir, donde vemos que no solo se exponen a los sanitarios que allí realizan las pruebas, sino que también se exponen los que se la hacen que si entran siendo negativos, probablemente salgas siendo positivo, donde se debe de entrar por un lado y salir por el otro sino se cumplen las distancias de seguridad , donde lo que yo personalmente pude ver, no se desinfectan la silla utilizada para sentar a los que se hacen las pruebas, donde pude ver con mis ojos, como de paciente en paciente no se desinfectan las manos o se cambian los guantes, donde al salir de la instalación, te ponen un rollo de servilleta para que te limpies las lagrimas al verte metido los bastoncillos por la nariz, rollo de servilleta que agarra todo el que allí sale para poder partir el papel, donde a todos los negocios de la isla y de toda España les están exigiendo la distancia mínima entre mesa y mesa , donde se le pide a todos los empresarios que se desinfecten las mesas y sillas por cada persona que se sienta, donde te piden que te desinfecten las manos a menudo o cada vez que toques lugares donde pudieron ver tenido contacto otras personas.

Ya no te digo lo mal que lo pasó, en este caso mi propia familia, entre ellos yo, que hubieron 11 positivos por unas pruebas incorrectas, para no decir falsos positivos, donde no fue por ver estado de fiesta ni mucho menos , sino que en tres días entre unos y otros, nos vimos, familia que en la misma unidad familiar hay por casa, como mínimo tres o cuatro personas, donde la primera afectada se sintió culpable ante toda la familia y los posibles amigos que pudo ver estado con ellos, donde lloraron lo que no está escrito.

Yo no quiero que ninguna familia pase por esta situación y menos siendo un positivo erróneo, del cual si no se llega a rectificar y repetir las pruebas se hubiera pasado como mínimo 10 días hasta la próxima prueba, días que se pasan angustiosos y no tengo más significados. Unas 64 o no sé cuantas más, que pudieron ver llegado al confinamiento de un pueblo y de una isla con las restricciones que eso conlleva, bien económicas y socialmente.

Tienen que pensar que por mínimo tres cuatro días hubieron empresas en la isla que cerraron sus puertas con el coste económico que eso supone, donde ya no solo fueron empresas autónomas, sino también publicas como nuestro cabildo insular de el hierro, que afecto a nuestras residencias, sino también la asistencia de servicio a domicilio y al resto de trabajadores de otras áreas, con todos los costes que eso supone para NUESTRA EMPRESA PÚBLICA, porque es la empresa de todos los herreños.

No quiero ni imaginar cuantos pueblos o ciudades han puesto en cuarentena por errores por contaminación de las pruebas covid-19, no me lo quiero ni imaginar, porque si sucedió aquí, donde se podrían estar haciendo unas 150-200 pruebas diarias, como será donde se están haciendo 1000 o más pruebas al día, por eso es por lo que se tiene que reclamar y denunciar estas cosas, por eso es que se tienen que llevar a donde allá que llevarlas, porque estos errores pueden costar la economía de una isla y un conflicto social que no tiene luego reparación.

Solo hay una cosa clara, y es que quien supervisa esos protocolos, no está haciendo su trabajo y es el máximo responsable del hospital de El Hierro, y es, por ahí, donde todos los herreños tienen que reclamar y donde tenemos que exigir que las cosas se tienen que hacer bien y como marcan las normas sanitarias en esta cuestión que nos afecta a todos.

Estamos hablando que si no entras con COVID-19, sales con una depresión por errores como estos y eso es muy grave, donde por unos días, sin tener el virus, te sientes como si lo tuvieras, porque cualquier cosa piensas que es por eso. Pruebas que nos enterábamos antes por la prensa, que por el propio hospital, pruebas que llegaban primero a la sociedad que a los propios afectados, es que podría aquí pegarme el día, pero creo que queda reflejado, que algo no funciono y que queremos que se mejore por el bien de la sociedad y en este caso, de los herreños. DE AQUI, MI MAXIMO APOYO, FALTARIA MÁS A TODOS LOS SANITARIOS Y TRABAJADORES DE NUESTRO HOSPITAL Y DE ESPAÑA EN GENERAL, GRACIAS. Se juegan la vida y eso es de agradecer y de reconocer. Y Siento que si con esta acción, se puede estar haciendo daño, pero es mi responsabilidad como ciudadano denunciarlo.